miércoles, 12 de enero de 2011

En esos momentos me sentía confundida, nerviosa, tenía miedo.. te miré y me dedicaste una sonrisa. Quizá intentabas ayudarme porque sabías lo que pensaba, tal vez sonreíste al recordar, o puede que no supieras qué decir.. pero fuera lo que fuera, aquella sonrisa hizo que me tranquilizara, que me dejara llevar por el momento, sin pensar en el pasado, sin pensar en el futuro, sin pensar en lo que tendrá que venir, solamente viviendo el momento.. como lo habíamos hecho durante todos estos años. Te abracé con fuerza, no quería verte marchar, no quería que se rompiera aquella sonrisa que echaba de menos.. pero aunque te fuiste, tu sonrisa jamás se marchó. Seguiste sonriendo incluso cuando te despediste con un "hasta pronto"..